22 de Dic de 2023
Pondré señales en el cielo y en la tierra
Actualidad
En estos días las señales que encontramos en nuestra tierra no son demasiado positivas: guerras en Tierra Santa, crispación política, aumento de las diferencias sociales, las matanzas indiscriminadas, como la de Praga ayer, la niñez y juventud sufriente …
Hay tantas señales negativas, tanto dolor y tanta desesperación, que no sé si en estas navidades, ante tanta oscuridad, podremos encontrar la luz que indica el nacimiento del Salvador. Debemos vencer la tentación de que las tinieblas cieguen el resplandor del Niño Dios que se hace hombre para hacer surgir su Reino.
Por eso os invito a intentar a luchar contra el pesimismo vital que nos lleva a dejarnos vencer por lo negativo, a pensar que nada podemos hacer, que no hay nada nos salga bien, del sentir que Dios nos ha abandonado, a pensar que el último apague la luz y cierre la puerta. ¡No! Ésa no es la esperanza cristiana. Levantad la cabeza, porque el príncipe de la paz acampa en medio de su pueblo, para anunciar la salvación, el compromiso de Dios con sus hijos.
Venced la tentación de sólo mirar lo malo, el dolor, lo que falta por hacer, las cosas que no tenemos. Mirar a vuestro alrededor. Observad las pequeñas cosas buenas que Dios hace alrededor nuestro, de los pequeños signos que nos muestran que el mal no tiene la última palabra, de que sigue habiendo esperanza. Mirad en torno vuestro y descubrir las pequeñas yemas de la higuera que ya se ablanda y anuncian algo nuevo. Seamos positivos y busquemos las pequeñas señales que indican que Dios está con nosotros.
¡Feliz Navidad!